Hoy volvemos a hablar del desarrollo del proyecto y los problemas de la vía verde del Mediterraneo a Santander. En esta ocasión para contaros los problemas que están encontrando para su desarrollo en el municipio de Oña. Donde las administraciones han planteado un desvío artificial con respecto al trazado original de la vía verde. Contra esta posibilidad han elevado la voz 15 asociaciones de la zona por la desnaturalización e incremento de coste que este desvío supone.
Podría pensarse que la finca origen del problema tuviera algún derecho sobre este tramo de antiguo trazado ferroviario, pero no es así. El trazado de la vía está correctamente registrado como propiedad del Estado cruzando la finca. Lo fácil sería utilizar el trazado tal y como está, y como se hace en el resto de 60km que unen Burgos con Cidad Dosantes. Ya anteriormente el propietario de esta finca, consiguió que la finca La Santé (este es el nombre de la finca), no se incluyera en el Espacio Natural Monte Obarenes.
Los 60km en desarrollo que estarán terminados en 2022, quedarían cortados en los 1500 metros que discurren por esta finca. La localidad de Oña ha perdido la mitad de la población en los últimos 30 años, casi los mismos años (23) que llevan bloqueando los propietarios cualquier proyecto que pudiera afectar a su finca. En la localidad se confia en este proyecto turístico para ofrecer oportunidades a la población y evitar la despoblación. Os mantendremos al corriente y esperamos que se resuelvan pronto los problemas en esta vía verde del Mediterraneo a Santander. Esta vía verde promete ser una de las vías ciclistas más largas de España y permitiría atravesar la Peninsula prácticamente de Norte a Sur.